Si alguna vez me recuerdas
Sierra y Asli no tenían demasiado en común; ella era una artista con un trabajo que no la llenaba. Para él, su trabajo lo era todo. Ella observaba cada detalle a su alrededor. Él apenas despegaba los ojos de su portátil. Ella vivía la vida en color, él la vivía en blanco y negro. Y desde el primer momento, su his...