Nora tenía la vida que cualquier chica de veinte años desearía, sus padres son dueños de una de las empresas más reconocidas del país y parece que tiene una vida perfecta. Hasta que los problemas empiezan a llegar a su vida, cuando alguien entra a su casa, así que sus padres deciden contratarle un guardaespaldas...
Cuando el hambre y la desesperación arrasan, se toman medidas que uno puede llegar a creer desesperadas. Maia lo descubrió cuando se vio sumida en un mundo en el que cumplir las fantasías sexuales de algunas personas a través de una pantalla significaba tener una mejor calidad de vida. ¿Pero qué pasa cuando se decide...
-¡Calidad certificada, belleza exorbitante, y virgen queridos compradores! La puja comienza ahora, con una extranjera de veinte años; la exclusiva pieza del día de hoy. -¡Cien mil dólares! -gritan con alevosía desde el estrado. -¡Medio millón! -ofrecen de manera repulsiva, y degradante. -¿Quién da más caballeros...