MASOQUISTA
El era su omega, el era suyo y de nadie más. -¿Que más quieres para saber que te amo?- habló el alfa sosteniéndolo de la mano bruscamente. -No quiero más de tu amor, no cuando me lastima y me causa dolor-respondió el omega con lágrimas en los ojos. ACLARACIÓN: ESTA HISTORIA NO ES MÍA, PERTENECE A JAMESSEB QUIEN MUY AM...