El Fuego De Tu Mirada
Los días pasaban y no encontraba manera de poder alejarme. Me hice adicta a tus caricias, a tu sonrisa y a tu calor, a tu ojos, a tus manos y a tu boca. sin darme cuenta, mi vida ya no era mía... sino que te la entregué a ti sin penssarlo. Mi mundo ya no me pertenecía, lo dejé completamente en tus manos. Y ahora me de...