Sumisa de su sangre.
Ella. Entre a un club ese día para beber con unas amigas, aun desde que entre me sentía observada, aunque algo incomoda o algo excitada. El. Se encontraba mirando desde una esquina aquella hermosa mujer con piel pálida y hermosos labios carnosos, sabia muy bien que hacer con ellos. Tenia ganas de hacerla adicta a el...