Wayward15
A la una, sale la luna
A las dos, él dice adiós
A las tres, se ve al revés
A las cuatro, encuentra un gato
A las cinco, hay un gran brinco
A las seis, ojala adivinéis
A las siete, hay que escónderte
A las ocho, están al acecho
A las nueve, cae la nieve
A las diez, empieza otra vez
Aquella melodía cantada por una pequeña se repetía en la cabeza de la joven una y otra vez, el frio comenzó a calarle los huesos y por fin abrió los ojos, la cabeza le dolía y no lograba recordar mas que su nombre: Anya.