Airana y Alessandro eran felices y tenian una familia estable, pero no toda felicidad dura para siempre,¿ verdad? Luego del "incidente" que tuvo Airana y la perdida que sufrieron ambos, Alessandro pensó que alejarse de ella era buena idea y asi protegerla, pues el Don de la mafia Italiana tiene demasiados enemigos. Pero eso solo consiguio dos cosas: Un desamor y una historia por delante. ¿Volveran a estar juntos? ¿Podra Airana perdonar a Alessandro? ¿Volveran a ser una feliz familia? ¿Seguira siendo ella la chica inocente de antes? Nada de esto esta claro aun, pero hay algo que si. Airana jamas volvera a ser debil, y hara que todos a su alrededor se arrodillen ante ella, hasta el mismisimo Alessandro, su ex amor...

Adrián Ricoy tiene un serio problema con su deseo sexual, no puede parar. Tanto es así, qué en su barrio hasta le pusieron un apodo. Míster Libido, es divertido, carismático. Esa emoción que tiene es lo que le falta a Elena ¿Será qué la correcta y seria chica caerá ante sus encantos? Seguro que sí, pero ese no es el verdadero problema. Descubre porque esta saga se llama: Por culpa de un Ricoy. Bienvenidos a la Precuela. Por: Viviana Valeria V.

Eric Campbell, un apuesto ranchero, lleva años buscando a la mujer ideal. Ésta debe ser hermosa, carismática, humilde, amable, y por supuesto, debe gustarle vivir en el rancho. Isabella Jacobs es, efectivamente, hermosa, amable, humilde y tal vez un poco introvertida. Busca empezar una nueva vida, y tal vez, sólo tal vez, le agrade vivir apartada de todo... en un rancho... con su jefe.

Carter Elek, mujeriego, mala persona, sin corazón, no cree en el amor y su única virtud, ser el mejor abogado del país. Mi abogado. [Por culpa de un Ricoy #5] *Por Viviana Valeria V.

Eder MacPearson lleva demasiado tiempo buscando, buscando la oportunidad que nunca debió haber dejado marchar. Y ahora ella no está. Ha desaparecido como si la tierra se la hubiera tragado. Y tras años de búsqueda, no tiene nada. Y cuando aquella mujer, le dice que lo que busca esta más cerca de lo que imagina, que se esconde tras su propia sangre. El Laird MacPearson no duda ni un instante cual es ese lugar. Pero toda la ilusión se desvanece cuando se encuentra cara a cara con Jannet O'Neill y descubre entonces que en todo este tiempo, no se pregunto que habría sido de su vida. No puede evitar que la rabia lo consuma, cuando descubre que la mujer a la que sigue amando, tiene una hija de otro hombre. Ella lo odia, el la desea, sus sentimientos los consumes y la guerra se desata. Ella es perseguida y cuando el descubre la verdad sobre su vida, hace lo que años atrás debió haber hecho.

Lady Kate Debbington se había resignado a ser una solterona el resto de su vida. Sin embargo, había tenido que acudir a un baile de sociedad en Londres, para complacer a su tía, quien no había perdido aún la esperanza sobre de que ella podía encontrar todavía un buen prometido. Alexander Thomas Fitzgerald, duque de Somersham, era un hombre atractivo, imposible de ignorar, quien había tomado la decisión de seguir viudo, después de haber perdido a su amada esposa. ¿Qué había empujado a aquel hombre a tomar una decisión inesperada por si mismo? ¿Podría acaso estar en las manos de alguien, como Lady Kate Debbington, la posibilidad de que él volviese a amar? *Portada realizada por Noabel

Una espía será traicionada por la persona que ama al cumplir una misión, morirá en el instante; pero lo que ella no sabía era que lo que había robado la transportaría al pasado, donde tomará la vida de otra persona. Tendrá que luchar por su vida y pasar de nuevo por ese sentimiento que llaman amor de la persona menos esperada. Aventúrate en esta historia que te atrapará desde el inicio con cada uno de los personajes. Mínimas faltas ortográficas, historia en proceso. ESTA HISTORIA ESTA PROTEGIDA, NO SE ACEPTA LA COPIA TOTAL O PARCIAL DE ESTA OBRA, NI MUCHO MENOS ADAPTACIONES. NO AL PLAGIO.

Nicholas transformó todo su amor por Katherine en rencor, ¿y si estaba equivocado?¿Qué deberá hacer para ganar su perdón? "Katherine salió de prisa de la galería de arte , con la sonrisa aún en el rostro saludó a la dueña del lugar, y avanzó en la tienda departamental. Cuando llegó al sector principal, escuchó los murmullos y vio un pequeño tumulto. Un par de guardaespaldas caminaba custodiando a algún personaje importante que paseaba por el lugar. La gente se apartó un poco y ella se quedó congelada, la sonrisa se desvaneció de su rostro y el cuerpo se le aflojó. Pero no fue la visión del hombre alto, de cabello oscuro y ojos verdes lo que la impactó. No, no fue volver a ver al imponente Nicholas Laurent después de seis años, el hombre que alguna vez había amado con locura; lo que la conmovió fue la pequeña niña rubia que él llevaba de la mano. Sólo había visto a la niña una vez pero la reconocía. Tenía el cabello tan claro como ella y los mismos ojos azules. Aquella niña era su hija, la hija que ella había creído muerta al nacer. Sin pensarlo dos veces se lanzó hacia ellos."

David Novikov. Ruso. Volará de su país para hacerse cargo del bufete de abogados de su padre. Justo. Controlador impulsivo. Sentimientos no entra en su vocabulario, dice que es para débiles. Tres reglas: Ser puntual. Nunca interrumpirlo. No hacer preguntas personales. A la hora de tener sexo puede faltar cualquier cosa, menos una corbata. Y no, no es para atar a nadie. Andrea O'Connor. Estadounidense por su padre, Venezolana por su madre. Enamorada de su profesión, la justicia va en sus venas. Puede faltar todo menos su copa de vino en las noches de estrés. No depender de un hombre ni mucho menos de un matrimonio es su frase favorita. Depender de alguien no es opción para ella. El sexo es diversión, mientras sea con la persona que quieres y, de volverse algo serio, jamás serle infiel. Sin refutar, pues de hacerlo las consecuencias costarán caro, aquí todo es Como dice el Jefe. Historia COMPLETAMENTE MÍA. PROHIBIDA su copia y/o adaptación.

Completa ✅ Lord Bernard Relish, tercer hijo de Su Gracia, el difunto duque de Devonshire, Alfred Relish, había servido con distinción en el ejército de Su Majestad. Una herida grave sufrida en el campo de batalla -que le dejó una cojera permanente- lo obligó a retirarse del servicio y regresar a Inglaterra, donde se volvió un hombre sombrío, taciturno y profundamente desencantado. Con la intención de devolverle algo de ánimo, su hermano, Lord Albert Relish, le persuadió de acompañarle a una de sus veladas privadas, celebradas en secreto dentro de los círculos más atrevidos de la aristocracia londinense. Lo que Lord Bernard no imaginaba era que aquella noche lo arrastraría a una situación tan inesperada como comprometida, todo a raíz de una joven mujer impetuosa, que, por error, eligió el mismo escondite que él para escapar de un escándalo aún mayor.