No saber qué estaba pasando era el lema de nuestra amistad. No hablar de ello, el segundo. Es que no haberlo puesto en palabras en ningún momento nos ubicaba en una suerte de trance, difícil de explicar pero fácil de sentir. Y ambos parecíamos haber aceptado el trato sin cuestionarlo: de alguna manera, eso lo hacía más especial. Pero lo cierto es que, en el complejo mundo de las relaciones humanas, nada nunca es tan simple, y aunque lo que fuera que tuviéramos aparentaba serlo cuando estábamos juntos, más tarde empezaría a tener consecuencias. Y no sé el, pero yo, no estaba segura de poder aceptarlas. Hay historias que todo el tiempo terminan y nunca se acaban.

Hugo pertenece a una de las familias más adineradas del país. Anaju trabaja en una agencia de publicidad. Hugo se iba a casar pero su prometida le ha dejado. Anaju no tiene novio, ni quiere. Hugo tiene que presentar a sus padres a su prometida o sino su herencia peligra. Anaju es libre, no tiene una vida planeada. Pero les une un hecho. Los dos son mejores amigos.

Durante la cuarentena en Barcelona, en el balcón de enfrente, y a través de una pantalla, Ana Julieta y Hugo; se encuentran.

Tras el confinamiento a causa de una pandemia mundial, los concursantes de OT vuelven a la academia para darle al programa el final que merece, pero tristemente ya nada es lo mismo. El contacto con los fans y haters, la distancia entre ellos y ver cosas de las que no se habían percatado en la academia les pasara factura a cada uno de ellos, pero sobretodo a Anajú y Hugo, que acabarán escribiendo un final para su historia de amor.

La función ha terminado y las luces de neón se han apagado, los aplausos han cedido y ella ya se encuentra entre bambalinas. Sola con sus pensamientos. El silencio habla más de lo que le gustaría en estos momentos y por eso decide que la música será su única acompañante esta noche. Abre su spotify y busca la canción que lleva tarareando toda la velada . Puede que ese rubio de ojos nácar le ponga banda sonora a su vida.

Él entró en la academia más importante de España Ella nunca se presentó al casting Él se convirtió en una estrella mundialmente famosa Ella trabaja en universal music como subdirectora de diseño Él necesita calma en tanto alboroto Ella necesita alboroto en tanta calma

"Quisiera haber querido lo que no he sabido querer". "Me equivocaría otra vez" es la segunda parte de "Malditas ganas". Hugo y Anaju llevan sin verse desde hace tres años y se reencuentran al ser invitados a la misma boda. La situación entre ellos ha cambiado, y ahora tienen una hija en común, pero las ganas siguen intactas.

"Se han vuelto a encontrar mis ganas y tus tonterías..." Han pasado casi cuatro años desde que salieron de la academia y cada uno tomó su camino. En algunos casos, ese camino les había llevado a la fama; en otros, a un éxito más moderado... pero todos se sentían afortunados de seguir en la música. Anaju ha perdido la inspiración y no logra superar lo que logró con su famosa canción "Me iré", que compuso dentro de la academia. Hugo le devolverá la inspiración.

¿Cuántas veces habéis pensado que Anahug es un fanfic? ¿Que todo lo que les rodea parece sacado del guión de una comedia romántica? Ella tan perfecta, él con la palabra problemas escrita en la frente. Ella la calma, él el caos.. Este 29 nos hemos juntado algunas limonas para unir nuestros fanfics en uno, un día entero donde podréis leer capítulos inéditos de aquellas novelas que Anahug ha inspirado. ¿Te apetece acompañarnos en la locura? Pd: En esta vida hay que ser egoístas y remar siempre a favor de la fantasía