Charlie es dinámica y divertida, con gran personalidad, y un punto de locura. Aficionada a las películas de misterio y acción, pronto se verá sumergida en una, al más puro estilo Indiana Jones, y no por su condición de arqueóloga, sino porque tiene un talento inquietante para meterse de cabeza en situaciones peligrosas. Josh es un cazarrecompensas, descarado y atractivo, que se cruza en su camino, sin sospechar que acaba de toparse con el que se convertirá en su mayor dolor de cabeza. El padre de ella fue asesinado en su laboratorio, a causa de un invento que ideó en su momento, "adquirido" por Inteligencia Militar. El programa consistía en implantar a los voluntarios un dispositivo neural con el que mejorar problemas conductuales, pero, como todo buen invento, hay quien descubre la forma de convertirlo en pesadilla. Latentes, llamaron a los implantados. Eran 12, y Charlie la encargada de sacarlos de circulación, por el peligro que suponen. Algo que no puede hacer sin Josh, y sin alguna "ayudita" extra. © Todos los derechos reservados. Está totalmente prohibida la adaptación o copia de la novela. Obra registrada en Safe Creative con el código 1810288838009 ©

Mia Collins ha tenido que sobrevivir sin sus padres y familia. Vivir con su mejor amigo y la madre de él, le ha visto bien, pero cuando Chris, un chico bastante extraño llega a su vida, para vivir en su casa, la hace recordar mucho más las advertencias de su padre. Pero ya la había recordado cuando conoció a Allen. Y ahora intenta alejarlo, pero le es imposible. Tendrá que protegerse de Allen y Chris, porque representan un gran peligro. Pero necesita descubrir los secretos... "No te acerques a los chicos de ojos azules y cabello negro. No sabes lo que ellos ocultan." Black Angels Obra registrada en Safe Creative bajo el código 1601076192874 Portada hecha por la grandiosa: LeyMaxwell

Entré al baño para arreglar un poco mi maquillaje. Unos pasos a lo lejos me hicieron voltear. Eran pesados y bruscos, estaba segura que eran de un chico ya que aquí la mayoría de las chicas usaban tacones y venían hablando a los gritos. -Si vienes a pedirme que te haga algo, estás perdiendo tu tiempo amigo -me encogí de hombros y me giré al espejo de nuevo. Limpié mis mejillas y me extrañó no escuchar respuesta de su parte. Hice una mueca restándole importancia y fijé mi vista en mí celular. Una respiración profunda pegó en mi cuello y antes de que pudiera voltearme, un paño blanco me pegó de lleno en la boca. -Shh -dijo en mi oído. Mi respiración comenzó a pesar y de a poco todo se fue volviendo oscuro. PROHIBIDA SU COPIA Y/O ADAPTACIÓN, TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS ©