El internado
••• Desperté en medio de aquel bosque al que prometí no volver, mis manos estaban atadas, y el frío recorría cada parte de mi cuerpo dándome escalofríos.Estaba herida y ya no quería seguir. Me levanté y caminé hacia la ruta y ahí se encontraba él, con sus manos ensangrentadas y sus puños cerrados. -Dijiste que no iba...