LA EMPERATRIZ MASCULINA ADORA SU MOÑO
Ning Jie, querido por el emperador, ni su supuesto hijo, a quien había adorado mucho, ambos no se molestaron en visitar a la emperatriz enferma, ambos lo abandonaron, pero la esperanza no se perdió, un lindo niño que solo su amor había cuidado de su emperatriz. madre sin quejas y la emperatriz enferma se había recuper...