Es increíble el ver cómo de un segundo a otro te encuentras en una situación crítica, dónde lo único que te queda es la poca esperanza y el consuelo de tus seres queridos. ¿Tantas veces lo desee para que se cumpliera? ¿Qué tanto daño me hicieron para ceder a esto? ¿Acaso fui yo la culpable? Tantas preguntas que invaden mi mente preguntándome si yo era la culpable de lo que sucedió, algunas de mis opiniones y expectativas que tenía de varias personas cambiaron por completo. Quiero cambiar y de eso sí estoy segura, así que haré lo posible para intentarlo... Al ver la situación tan desgarradora en la que estoy diría que apartir de ahora no me arrepentiré de las decisiones que tome, y si es que puedo viviré los últimos minutos que me quedan con felicidad y sin arrepentimientos. Las cosas simples a las que no le tomaba importancia ahora las extraño y las tengo como un anhelo que solo volverán a ocurrir cuando pueda levantarme. ¿Tú ya disfrutaste de ese cálido baño? ¿Disfrutaste de ese gusto que tenías por un postre? ¿Te encantó caminar por esas praderas? Y tú...¿Ya disfrutaste ese momento?