«La luz cree que viaja más rápido que cualquier otra cosa, pero se equivoca; da lo mismo lo rápido que pueda viajar, porque al final, la luz descubre que la oscuridad ha llegado antes que ella y la está esperando.» Terry Pratchett «¿En dónde estoy?» Cuando abre los ojos, se encuentra sola, en un sitio completamente negro.    «¿Qué es este lugar?» El frío le cala hasta los huesos.    No recuerda haberse ido a ninguna parte. El último instante de consciencia fue cuando se recostó en la cama para dormir.   El silencio le aturde. Logra ver a pesar de la oscuridad impenetrable, como si su cuerpo desprendiera un tenue brillo, y se descubre aun en pijama.   «Entonces es un sueño.» Trata de convencerse de que, si cierra los ojos, volverá a despertar en su habitación. Repite el acto una y otra vez, pero no logra volver allí.   Siente que se hunde. Algo más fuerte y pesado que ella la arrastra hacia el fondo de aquel lugar sin principio ni fin. No puede gritar ni moverse.   «¿A dónde me llevas?» Le pregunta en silencio a aquella criatura que no puede ver. Nuevamente, nadie responde a sus palabras. Está sola, y eso es lo que más la aterra. Se deja arrastrar, incapaz de luchar contra ella.   «¿A dónde han ido todos?» A su mente llega una lluvia de rostros que le resultan familiares pero que no logra reconocer por completo. No recuerda sus nombres, sin embargo, sabe que son importantes y les quiere porque de alguna forma el recuerdo de sus sonrisas logra tranquilizarla; le indican que todo irá bien. • #1 en Digimundo 29/10/2019 2º puesto en los Digimon Award: 01/08/2020 junto con Whisimbell de SombrayLuz • Los personajes Annika Akiyama, Hotaru Mori y otros, así como las ideas y el desarrollo de esta historia y de la bilogía en general, son de mi propia creación. Todo lo demás pertenece a Akiyoshi Hōngo. Este fanfic comenzó a subirse a WATTPAD el día 06/07/2019 y se completó

Libro #1 de la saga Hera. Mis manos se han manchado con la sangre de dioses nefastos sin arrepentimiento alguno, como también he amado al dios que se volvería el ser más poderoso que alguna vez existió. He destruido el Olimpo a su lado con una simple espada empuñada entre mis manos, convirtiéndome así en la primera mujer capaz de luchar hombro a hombro junto a tres dioses capaces de partir el cielo en dos, hacer que las mareas suban y el infierno se abra en la tierra. Ahora bien ¿cuánto tuve que perder para poder ser lo que ahora soy? «Copyright © Todos los Derechos Reservados»