-¡Emma! ¿¡Cuantas veces tendré que repetirlo!? ¡¡No entres a mi habitación!! -me gritó Nick. -¡Mamá me lo pidió! -le grité de vuelta. - ¡Con mis cosas nadie se mete!! -escuché como soltaba groserías- ¡Me la pagarás! -escuche el portazo. -¡No te tengo miedo! -mordí ni labio. Nick abrió la puerta de mi habitación, me tomó de los brazos y me arrinconó en la pared. -¿Con que no me tienes miedo, eh? -susurró en mi boca con una sonrisa. -N-no -mi respiración era agitada y entrecortada mi voz. -Ya lo veremos. Me tomó de la cintura e impacto su boca contra la mía. Maldición ¿los hermanastros se pueden besar?

Una chica de 16 años de Texas, llamada Samanta Jhonsson , tiene mala fama de ser una zorra, pues su conducta no la ayuda. después de un tiempo llega un chico que cambia su vida por completo ella a pesar de ser una zorra llega al matrimonio virgen.

Se aman. Se quieren. Se desean. Pero hay un pequeño detalle que los separa, son hermanastros. Ella tiene 17 años, una vida desastrosa y varias inseguridades. Él tiene 19, una vida que cualquier adolescente querría y le sobra el orgullo. Son dos polos totalmente opuestos, ¿pero eso logrará detener lo que siente el uno por el otro? Prohibido plagiar y/o adaptar esta historia. En caso de plagio me veré obligada a denunciar inmediatamente. Registrada en Safe Creative: 1810128712377 ➡Empezada: 2/08/18 ➡Terminada:9/10/2018

||Primer Lugar en los Premios Pandora 2018 en Historia Corta|| Ella era la más linda de todas. El sólo un enfermo de amor. Ella era su pequeña obsesión. El era el loco obsesionado.

Meibel Coleman una estudiante de 16 de la secundaria muy inquieta,directa y inseparable de sus amigas/os.sufre bulling de parte de Cameron y sus amigos, ella harta de sus abusos toma una decisión Cual sera esa decisión? Que ocurrirá con los chicos? Te invito a que acompañes a Meybel en su larga historia de risas, desamores .

-tío tu hermana es odiosa -¿le puedes decir a tu amiguito que no se meta en el baño cuando me estoy duchando? -no seas tan creída que no tenía el más mínimo interés en mirarte... -¿A no? ¿Por eso te quedaste mirando? -pero que dices, eso no es verdad -¡Ya basta los dos!-Parker y yo nos quedamos mirando a mi hermano con los ojos como platos , mi hermano no se solía enojar pero ahora mismo lo estaba.

Mayte, una chava de 18 años que está acabando el último semestre de bachillerato y pronto entrara a la universidad. Ella comienza a fijarse en el mejor amigo de su hermano después de su llegada y empiezan a tener algo. Pero años atrás, ellos no se llevaban muy bien y todo está por cambiar dando un giro de 90 grados en sus vidas, lleno de muchas barreras y complicación para poder tener una relación feliz. Si quieres saber más de está historia, te invito a qué la leas y te quedes hasta el final. Se que te va a encantar. ATT: Andymisterio 🌺

Puedes hacer lo que quieras con mi corazón, romperlo, jugar con él, pisotearlo... Pero con Jazzy no se juega, porque también es mi hija. Derechos del autor NO ACEPTO ADAPTACIONES Ten imaginación, crea tu propia historia Portada echa por: LaPrincesaTatuada Escritora: LaPrincesaTatuada

Andrea es una chica que tiene 16 años es divertida, guapa, lista y, tiene 2 mejores amigas una es Samantha y la otra es Cristina Se muda con sus amigas a la casa de su hermano y sus amigos Habrá amor entre ellos? Si quieres saberlo sigue leyendo....

When Alexis agrees to help the school's player, she must guard the secret that could unravel everything - even as unexpected feelings complicate the game. *** What happens when Alexis Dawson, the 'resident loser' of Redwood High, agrees to help the school's notorious player, Aaron Walker? How can she stop herself from falling for him? It isn't all love and romance - Alexis has a secret of her own. Join them on a journey of jealousy, betrayal, trust, friendship, and love. A little favour just got a whole lot more complicated. *** He was so close, his breath hit my lips. His eyes darted from my eyes to my lips. I stared intently, awaiting his next move. His lips fell near my ear. "Shut up and kiss me" He whispered roughly. A chill shot up my spine. I pulled back, staring at his eyes and leaned in...