GIRASOL
65 histórias
Estrellas perdidas de isnunchi
Estrellas perdidas
isnunchi
  • Leituras 45,505
  • Votos 5,601
  • Capítulos 54
Ellos tratan, tratan tanto, de brillar una vez más.
mil y una lágrimas de -manosfrias
mil y una lágrimas
-manosfrias
  • Leituras 558,835
  • Votos 66,340
  • Capítulos 182
¿Cuántas lágrimas puede derramar un chico? ©Obra registrada en Safe Creative. No copieis, sed originales.
eyes de romanticista
eyes
romanticista
  • Leituras 9,776
  • Votos 1,019
  • Capítulos 11
tus ojos eran claros, en uno vi el principio y en otro el final
Ojos marrones (EDITANDO)  de sofieverlove
Ojos marrones (EDITANDO)
sofieverlove
  • Leituras 20,832
  • Votos 1,098
  • Capítulos 5
Todos dicen que los ojos claros son los más hermosos, pero ¿qué unos ojos marrones no pueden enamorar?
y el mundo colisionó por un instante. de juvxntas
y el mundo colisionó por un instante.
juvxntas
  • Leituras 446
  • Votos 44
  • Capítulos 3
Sólo por un instante. Un poco de miel. Porque cariño, hoy es el día.
Art. de oceanos_
Art.
oceanos_
  • Leituras 59,459
  • Votos 5,504
  • Capítulos 16
Todo se volvió negro desde que te fuiste, ahora no encuentro el color idóneo para que regreses.
DOS MENOS UNO de interseccional
DOS MENOS UNO
interseccional
  • Leituras 5,431
  • Votos 816
  • Capítulos 6
Todo parecía ser ilegal; las drogas, las armas, la prostitución de niñas menores. Todo. © interseccional (2017) Portada: Bodegón con cacharros (1636), Francisco de Zurbarán
Planetario. de oceanos_
Planetario.
oceanos_
  • Leituras 26,078
  • Votos 2,106
  • Capítulos 4
Solo soy yo, perdiéndome.
frustración. de juvxntas
frustración.
juvxntas
  • Leituras 408
  • Votos 50
  • Capítulos 2
El sueño. En esta ocasión, la clave es el sueño.
Los cadáveres que nunca fueron reclamados de MorJazmines
Los cadáveres que nunca fueron reclamados
MorJazmines
  • Leituras 23,224
  • Votos 3,253
  • Capítulos 11
Una recopilación de huesos descompuestos y carroña humana. Una recopilación donde más de uno se perdió en el camino y no fue capaz de reencontrarse a sí mismo. Donde más de uno torció el rumbo y le escupió a su cara trastornada en el espejo. Ah, como apesta a sangre y a humo aquí abajo. Pronto se incendiarán estos cadáveres con el alcohol de la alacena. [Una serie de cuentos sin orden alguno.]