Díez poemas para no morir de amor (En proceso)
Siempre he dicho que cuando escribes un poema, no buscas una rima o una palabra exacta. Simplemente comienzas a sacar lo que hay adentro; amor, rencor, dolor, alegría. Lo sacas de cualquier órgano, del corazón o el hígado, pero aunque no te desahogues del todo, afloras un poco de eso que los poetas llevan dentro. Sí...