Minuit
NekoZaok
Asombrado por el color hipnotizante de sus orbes, el demonio no pudo evitar perderse en la intensidad de esos ojos verdes, mismos que se encontraban perdidos, desenfocados, como si su mente estuviera atrapada entre la conciencia y el sueño.
Sabía que tenía todo el tiempo del mundo para explorarlo. Para descubrir cada centímetro de su cuerpo y cada rincón de su alma. Sin más demora, continuó.
-¿No crees que es hora de que me regales tu voz?..
ONE SHOT
DEMONXHUMAN