Bienvenidos a la visión de un poeta (que siempre está en su mundo) sobre el amor y la muerte. El amor y la muerte son las dos únicas cosas en esta vida que por más que queramos, no podemos evitar

Mis musas viven ocultas en un rincón de mi alma, en un jardín, salen y tocan melodías en mi mente para traerme la luz de la poesía.

Cuando no sabes cómo expresar lo que sientes y tu única salida es un lápiz y una hoja de papel los sentimientos fluyen, tus manos solo se dejan llevar al compás de tus emociones. Los escritos que verás aquí son más que poemas, son sentimientos, emociones que buscan provocar una sensación en ti o darte ánimos para seguir si la estás pasando mal. Estos poemas son escritos desde el corazón de una escritora que solo quiere expresar las cientos de emociones e ideas que pasan por su cabeza, ya sea por experiencia propia o porque se ha sentido lo suficientemente empática como para escribir sobre un tema. Lo que busca Un poema para cada sentir es llegar al corazón de cada uno de los lectores, sabiendo que la vida no es fácil, pero que si luchas cada día por lo que quieres lo podrás alcanzar, por eso, si estás en un mal momento recuerda que nada es para siempre porque despues de una tormenta siempre hay un arcoíris. Premios: * 2do lugar en el concurso Midnight awards 2020 en la categoría poesía otorgado por @Midnigh_awards2020 (Enero 2020) * Sticker de Mención Honorífica otorgado por @ReedInHouse (Marzo 2020) * 2do lugar en el concurso, Concursos Mensuales 2019 - 2020 en la categoría poesía y sticker de mención honorífica como Poemario más sentimental otorgado por @PremiosPlanetas (Marzo 2020) © Todos los derechos reservados. Bajo las sanciones establecidas en las leyes, queda estrictamente prohibida, sin autorización escrita del autor, la reproducción total o parcial de esta obra, por cualquier tipo de medio o procedimiento, sea electrónico, fotocopia u otros.

A través de poemas describo el cielo (y el infierno) que hay dentro de cada poeta, ya que lo divino y lo humano se separan por mucho y por poco, por mucho por que lo divino no se calcula y lo humano cada siglo que pasa va a peor