atbmm2008
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En una vida llena de incertidumbre, Joong Archen, un omega embarazado es negado por la sociedad de la realeza debido al secreto guardado hace unas semanas. En una fiesta, se entregó a un alfa desconocido, preso del pánico huyó sin mirar atrás, sin saber que llevaba el fruto del pecado creciendo en su vientre. Cuando se lo contó a su familia lo menos que esperaba era consuelo, una bofetada por parte de su madre alfa, y una mirada de desprecio y decepción por parte de su padre omega lo llevaron a tocar fondo. Sin embargo, en una fiesta de coronación conoce a Dunk Natachai, un alfa heredero de Italia. La conexión es mutua, pero el omega decide salir de ahí antes de que se entere de su pequeño secreto. El alfa corre tras él y, cual cenicienta, pierde una de sus zapatillas en el penúltimo escalón. Aquello no lo detiene y sigue corriendo, Dunk lo alcanza y lo gira bruscamente, el omega hace el inconsciente acto de proteger su vientre de un posible peligro. Aquello fue como una señal clara de que estaba en cinta, destrozado, el omega solo puede llorar amargamente al ver que ha sido descubierto. El alfa lo abraza y lo llena con su aroma a menta, el omega suspira ya tranquilo. Él es el alfa de aquella noche, cómo podría si quiera olvidar aquel exquisito aroma. Dunk lo había estado buscando por tanto tiempo, y ahora que lo encontró, no lo dejaría ir. Vuelven al palacio y anuncian su pronto matrimonio, el omega nota las miradas envidiosas de sus hermanas y la mirada avergonzada de su madre alfa. En la ceremonia de boda cuando el omega está a punto de tirar el ramo de flores dice: "Fourth está muy contento de que su padre esté con nosotros para siempre", el alfa pone su mano en la panza del omega y susurra suavemente: "Dile que papá también está feliz de estar a su lado para siempre, en especial acompañado de un bello y fuerte omega al que amaré eternamente". Dicho esto Joong lanza el ramo con una sonrisa radiante en su rostro.