Donghae necesita pagar las deudas de sus padres antes de cumplir la mayoría de edad. Hyukjae no necesita nada. En Heaven, Donghae encuentra una solución y Hyukjae una necesidad. |Serie de Heaven - Libro 1| TW: Prostitución, uso de drogas, abuso sexual, humillación, diferencia de edad.

Hyukjae es un hombre serio al cual le gusta manejar sus citas a discreción, especialmente por la poca aceptación hacia las relaciones homosexuales. Pero un error en las finanzas y despilfarro exagerado lo lleva al borde de la quiebra y hay una luz al final del camino que no quiere seguir.

Hyukjae sale con un chico hermoso y perfecto, solo que tiene un pequeño detalle. Se hace lo que el dice, sí o sí.

Donghae esta saliendo de una etapa sombria y dura de su vida pero aun asi parece que el amor le sonrie

Lee Hyukjae es un hombre tímido y vergonzoso respecto a la intimidad, a sus veintiocho años termino una relación de un lustro, pero después de diversos imprevistos termina casado con Lee Donghae un joven de veintiún años que al contrario del otro, es brutalmente honesto respecto a lo que quiere.

Donghae trabaja como asistente personal del director de una de las empresas mas prestigiadas de Corea del Sur, lleva una relación totalmente profesional con su jefe, parece que nadie lo odia, tiene un buen departamento y está totalmente entregado a su trabajo el cual le da un sueldo del que no se puede quejar, todo parece ir viento en popa hasta que suceden cuatro cosas al mismo tiempo: • Fiesta • Alcohol • Antifases • Sexo - Oh vamos, ¿Qué es lo peor que puede pasar en una fiesta?.- le pregunto Heechul intentando animar a Donghae para que asistiera. TERMINADA EN EDICIÓN

Todo comenzó con una mentira: Dunk convenció a su mejor amigo, Phuwin, de hacerse pasar por él en una cita que no estaba dispuesto a enfrentar. Lo que parecía un engaño pasajero se convirtió en el inicio de una red peligrosa de secretos, emociones prohibidas y consecuencias inevitables. Phuwin nunca imaginó que conocer a Pond Naravit, un hombre enigmático, intenso y calculador, marcaría su vida. Entre miradas, silencios y gestos inesperados, lo que debía ser solo una fachada se transforma en sentimientos que lo aterran: atracción, miedo y un vínculo que sabe que lo condenará cuando la verdad salga a la luz. Pond, acostumbrado al control absoluto, descubre en Phuwin algo que lo desarma: ternura, compañía y un calor que no había buscado. Pero lo que desconoce es que está construyendo su afecto sobre un terreno minado: una identidad falsa y una traición que podría destruirlo.

Dunk es un chico carismático y amable que solo se enfoca en sus estudios y nada más, todo eso cambiará cuando conozca a Joong, un tipo totalmente opuesto que hará todo lo posible por molestarlo y hacer su vida imposible. ¿En dónde terminará todo esto?...

Dicen que el amor verdadero nunca muere, que aunque el tiempo y la distancia intenten borrarlo, siempre encuentra la forma de regresar. Joong y Dunk lo sabían bien. Lo habían vivido en carne propia: se amaron, se casaron, y también se destruyeron. Entre silencios, errores y culpas, lo que alguna vez parecía eterno se quebró, dejando cicatrices imposibles de ignorar. Tres años pasaron desde aquella separación. Tres años en los que Dunk intentó convencerse de que podía vivir sin Joong, y Joong, de que había hecho lo correcto al dejarlo ir. Pero el destino -o tal vez la obstinación del corazón- tenía otros planes. Un crucero, la boda de sus amigos y el destino que parecía reunirlos a la fuerza, Joong y Dunk volvieron a enfrentarse. No solo al pasado, sino a sí mismos. A los recuerdos, a la culpa, al miedo... y, sobre todo, a la esperanza de que quizás, esta vez, pudieran hacerlo bien. Porque, aunque el amor nunca muere, lo difícil no es sentirlo: lo difícil es aprender a sostenerlo.

Adaptación. Todos los derechos reservados a su autora original. Jefe del infierno. Satanás personificado. Un tirano al que todos temen. Dunk Natachai detesta a su jefe desde el momento en que se conocen. Joong Archen es probablemente el hombre más insufrible y dominante del mundo. No parece entender que su asistente personal no es en realidad su esclavo personal.