GENOVEVA DE BRAVANTE
EPÍLOGO Llegó Desdichado, andando descalzo por encima de la nieve. Al ver aquel desconocido personaje, tan lujosamente vestido, con el brillante yelmo adornado con plumas en la cabeza, quedó muy impresionado. La condesa dedicó su vida entera al ejercicio de las más nobles virtudes, destacando entre todas ellas la de l...