En el mundo hay muchos corazones latiendo a diferentes ritmos, esparcidos en diferentes países, en diferentes ciudades e incluso en diferentes calles Hay tantos corazones que entre ellos se confunden y se enredan auque no latan al unísono Pero hay veces que los corazones se encuentran, se miran a los ojos y laten a la vez Y se encuentran Y son felices ¿Será lo que paso entre él y ella?

"-He matado personas, lastimado a inocentes-. -Es tarde, ya estoy enamorada de ti- susurra contra mis labios." ¿Y si el final de Drácula hubiera sido distinto? ¿Y si Mina no lo hubiera dejado morir... sino que lo hubiera elegido? De ese amor prohibido nació algo imposible. Alguien. Él no siente. Sus ojos azules a veces se tiñen de rojo y negro. Las víctimas lo llaman monstruo en sus últimos suspiros. Pero entre la muerte, el deseo y un mundo que lo rechaza, comienza a cuestionarse qué es realmente. ¿Monstruo o humano? ¿Hijo del mal... o heredero del amor más eterno? ¬¬ Ganadora del 2° lugar en el concurso Encontremos talento 2020 › Prohibido el plagio, adaptaciones de ningún tipo, ya sean aquí o en otra plataforma. › Prohibidos los lectores fantasmas. Si te gusta, vota y comenta. Si no te gusta o no te gusta lo suficiente, ve a leer otra cosa. Apoyemos a los autores › Todos los derechos reservados. › Trámite de registro de obra por el Gobierno Mexicano: en proceso

La vida no vuelve a ser la misma después de tantos intentos fallidos. Lohane había desistido de la vida, pero su alma seguía deseando que la tercera no fuera la vencida. Unos ojos iluminaban las ideas de la chica. Una voz guiaba sus escritos. «¿Quién eres, extraño?», pensó. Con el pasar de los años, los escritos de Lohane no solo cobran relevancia, sino vida. ¿Esto es real? ¿Esto es su pasado? Su presencia va más allá de una sombra, de un sueño o una brisa; es una voz que la acompaña en cada decisión. No es solo una fotografía. Él es el vívido recuerdo de un extraño. Una tormenta azota la ciudad de Fresno, y entre el caos del tráfico pesado, Edmond Dechart camina directo hacia los coches, decidido a acabar con sus migrañas. La lluvia arrecia y las luces de los autos apenas iluminan su silueta. Lohane Bouchard, testigo de la escena, lo arrastra fuera del peligro justo a tiempo. Al mirarlo, algo en sus ojos vacíos le hiela la sangre. Ella lo sabe: esto no es una coincidencia. Algo más oscuro estaba en marcha, y la biblioteca donde todo comenzó guarda respuestas que ninguno de los dos está listo para enfrentar.