Lauren y Camila están enamoradas la una de la otra, pero no pueden mostrar su relación y en muchas ocasiones eso provoca que se pelen. Cuando se muestran al público cada vez están mas distanciadas, y a medida que pasa el tiempo sus problemas se hacen mayores. Un día Fifth harmony va a una discográfica, la cual es dirigida por una mujer que no tardara en intentar romper su relación. Los celos de ambas las llevaran a tomar decisiones muy difíciles, decisiones que igual pueden conseguir que alguna se marche del grupo.

A veces, las cosas suceden sin que las puedas evitar, y ante esto solo puedes hacer una cosa: Luchar. En un descorazonador mundo repleto de muertos vivientes, sangre y crueldad, Lucy, tendrá que mantenerse a salvo, con todo lo aprendido en sus 16 años, por suerte siempre fue una ferviente seguidora de las cutres películas de "Zombies", que-menos es nada- la ayudarán en mas de una ocasión. Aunque parezca imposible, esas criaturas no son su peor problema, cuando Lucy une un grupo para intentar salir de su instituto, empezarán los quebraderos de cabeza. Mantendrá una extraña y torturante historia de amor, con Marcos, y tendrá que soportar los continuos ataques de los enemigos humanos. Sumergete en esta historia de amor en un escenario fuera de lo normal:Amor, acción, odio, venganzas y ,como no, Zombies.

Una extraña obsesión fruto del hallazgo fortuito de un diario en un campamento de verano a la edad de 15 años, deja el nombre de su autora, "Clarke Griffin", irremediablemente grabado en la memoria Lexa. Un primer flechazo adolescente que la volvió loca por una chica a la que sólo conocía a través de sus palabras. Han pasado doce años y ya poco queda de aquel amor adolescente. Lexa no se puede quejar de cómo le van las cosas, pero su vida da un giro inesperado cuando, una tarde cualquiera, la chica a la que lleva viendo un par de semanas paseando en el parque se le presenta como "Clarke Griffin". Todos hemos oído hablar del "amor a primera vista" pero... ¿existe el amor a "primeras palabras"? ©Miss Ginsey y Newage.

Oh, Jauregui, no debiste jugar si no sabías perder.