Sora un chico que es transferido a una nueva escuela debido a su gran habilidad en los deportes llega con la meta de ser el mejor pero conocera a muchos que se interpondran en su objetivo y otros que lo apoyaran hasta el final pero tambien buscara algo que perdio hace mucho

Eurielle siempre supo que era especial; todas y cada una de las personas que habitaban su ciudad se lo recordaban continuamente. Sin embargo, ella nunca le dio mayor importancia, ¿cambiaría acaso el hecho de que sintiera que le faltaba algo, de que estaba vacía? Ella no lo creía en lo absoluto, simplemente vivía cada día, monótono y aburrido. Pero, tras una fatídica noche en su ciudad, ella conoció a la mujer que se hacía llamar Redentor. ¿Quién sería ella exactamente? DISCLAMER: Algunos de los personajes de esta historia, al igual que lugares y algunos hechos, no me pertenecen, son propiedad de Square Enix y solo los uso para crear un fanfic

Resumen: El reino de Lucis ha caído y Noctis es el último superviviente de la casa real. Escapando del Imperio del Nido, su nave se estrella en el gran Paals, una tierra salvaje e inhóspita. Allí junto a sus compañeros, descubrirá que hay más poblaciones que sobreviven a la subyugación del Imperio. Noctis tratará de recuperar su reino gracias a las esperanzas renovadas que le devuelve una joven misteriosa que se escondía en lo más recóndito de Paals y a quien todo el Imperio le persigue. Personajes que aparecen: Noel, Noctis, Zack, Cloud, Hope, Gladio, Ignis, Prompto, Serah, Lightning, Aranea, Luna, Tifa, Vanille, Cindy, Aerith. Parejas: noctis-Serah, Noel-Aranea, Zack-Aerith, Cloud-Tifa, Ignis-Lightning, Prompto-Cindy.

ADAPTACIÓN Falso y pérfido eran sinónimos de mi nombre. De todos los papeles que pude protagonizar, era dueño del único que todo el mundo en mi situación, rechazaría. Lo peor era que esta no era una obra de teatro, cuyo objetivo es sólo representar, actuar y fingir; lo curioso es que esto es la vida real, y aquello de actuar y fingir tenía que hacerlo de la mejor manera posible y existente. Él, algo muy parecido al príncipe azul de los cuentos de hadas que mi madre me contaba cuando era un niño. Ella, la mejor amiga con la que deseaba toparme desde los seis años, única e incondicional. Decían que ella era la chica perfecta para él. Yo, situado justo en el medio; enamorado del novio de mi mejor amiga.