Desintegrada.
Las ramas se cayeron, las cortezas se dividieron, las hojas verdes perdieron su verde vivo para portar el negro lúgubre de las cenizas. Ningún musgo se pegaría a esos troncos secos ni ningún pajarito alegre se posaría a descansar sobre los mismos. Muchos ents perecieron entre fuego, agonía e ignorancia, ahora Tibalt h...