«¿Quién iba a imaginar que me enamoraría de una bestia?» Qué horror es cuando la persona que más amas es la persona más fría del mundo, Qué horror es que le intentes demostrar tu amor y te saque a patadas de su vida. Qué horror es que tú seas la pobre indefensa presa de sus castigos y malas costumbres. Vivir con una «Bestia» no es nada agradable cuando todo se puede tornar horrible de un buen momento a un mal momento donde tú la pasas mal. ©Todos los derechos reservados a Lizbeth Vaz. © Historia escrita por Martina Buteler. ©Adaptada de una página de Facebook.

Cuando el amor de un matrimonio ya no es correspondido, hay dos caminos: Intentar, con cada parte de ti para que el amor surja y renazca. O divorciarte, si no quieres lidear con ello. Fue exactamente las decisiones que separó a los Frost. Una deseaba reparar su amor, y el otro no necesitaba más de eso en su vida. Cada uno por su lado lidiando a su manera con las secuelas que puede dejar separarse de la persona a la que juraron amor eterno. Siendo más difícil para ella, y más sencillo para él. Pero en la vida, si escupes al cielo, puede caerte en el rostro. Las jugadas en el tablero pueden ir en tu contra cuando menos los esperes. Y ya será muy tarde para reparar el error.