Algo he aprendido en estos años, estos años que pasaron lentos como si cada día alguien se empeñara en recordarme cuan doloroso fue amar... Aprendí que sólo se necesita de una persona... de un momento, para cambiar tu vida para siempre. Para cambiar tu perspectiva. Y trasgiversar tu pensamiento. Te obliga a reevaluar todo lo que crees saber. Hacer que te hagas las preguntas más difíciles ¿Entiendes lo que te ha sucedido? ¿Quieres seguir viviendo tu vida así? ¿Valió la pena el sufrimiento? Sin embargo a esta pregunta si le tengo respuesta... No, no valió ni una sola lágrima.... SEGUNDA PARTE DE SOLO ÉL, MI ARROGANTE MAESTRO. No copiar, ni adaptar.

Leah Gandhia, una joven enfermera, trabaja en un asilo de ancianos desde que se mudó a Nueva York en busca de una vida diferente a la que tenía en México, su padre y ella no tienen la mejor relación, y opta por ignorar los reproches de sus amigos y conocidos huyendo a otro país. Maxon O'Donoghue es parte de una de las familias más importantes del país estadounidense, y aunque posee una masculinidad magnética y buena genética, es conocido por su forma controladora y perfeccionista de ser. Cuando el destino une a ambos, no tienen un inicio muy favorecedor. A Leah le parece un hombre muy grosero, pero algo en él la atrae. A Maxon le parece una mujer muy insolente, pero algo en ella lo cautiva. Dicen que los polos opuestos se atraen, ¿Será verdad? #2 en Política - 11 de diciembre #3 en Crimen - 9 de Junio