Balbuceos
Lan Wangji tendía a levantarse siempre a las cinco de la mañana. Pues es era su horario. Rara era la vez que pasaba su hora de sueño, y despertaba más tarde. En ocasiones se levantaba antes, y eso era lo que más adoraba. Podía ver a su amado esposo dormir, como hacía pequeños gesto mientras dormía, como sonreía, hasta...