Serendipia
Lágrimas caían de aquel hermoso ser de negro, al encontrarse rodeado de aquellos crueles cultivadores apuntandole con sus espadas. -¿Me han derrotado? ¡Imposible! ¡Me niego!- Gritó Wei Wuxian Con ello una poderosa onda de poder explotó. La tierra se movía y agrietaba por debajo de sus pies. ¡Era él! ¡El mismo Wei W...