Cuando Gabriela recibe una invitación de su jefe para cenar, se sorprende por que en los dos años que ha trabajado para David Reiford nunca la había invitado o siquiera dirigirle la palabra a menos que no sean instrucciones para su trabajo. Esa misma noche todo cambiarían ara Gabriela. -cásate con migo Gabriela-me mira cerio con su copa en mano. -que?!- le miro incrédula pero no veo rastro alguno de broma en su mirada. Y así fue como mi vida cambio.

-¡No me pueden hacer esto!- exclama la chica ya fuera de sí y mira a las dos personas frente a ella. -Broo, cálmate...- intenta tranquilizarla su madre. -¿Que me calme?- su voz suena enfadada, mucho. Tensa su mandíbula y mira a su padre con odio.- ¿Porqué debería hacerlo? ¡Me han vendido! ¡HAN VENDIDO A SU ÚNICA HIJA POR DINERO!- grita más que molesta, indignada. -Era por tu bien... ¿Por su bien? Eso era el colmo. -No, era por el suyo. No creo que venderme a una persona que ni siquiera conozco sea por el bien mío. ¡Están locos, ambos, si piensan que me casaré! -¡Tendrás que hacerlo!- grita su padre ya cansado de la negativa de su hija y se levanta de su escritorio.- Te recuerdo que firmaste un contrato. La chica, Brooklynn, lo mira indignada y dolida. Muy dolida. Claro que firmó ese contrato, pero no con su consentimiento ni en sus cinco cabales. -Si. Un contrato que me hicieron firmar estando borracha.- reprocha con un nudo en la garganta. -Pues tendrás que hacerlo, de esto depende la compañía y muchas personas. ¿Cómo puedes ser tan egoísta y pensar solo en tí? ¡Mucha gente depende de nosotros! Incluso de esto depende no quedarnos en la calle. Lo mira molesta, con la mandíbula apretada y los puños cerrados a sus costados. Cierra los ojos un momento, siente la necesidad de llorar por la canallada que le han hecho los que dicen ser sus padres. Pero no por tristeza, sino de rabia. Encima diciendole egoísta, ¡a ella! es el colmo de lo absurdo. -Lo haré.- dice por fin luego de pensarlo mejor, abre los ojos, lo mira directo a los suyos y una pequeña pero traicionera lágrima se desliza por su mejilla... Lo único que le queda es aceptar la estupidez que dice su padre, no tiene de otra. Si ella firmó el contrato, con o sin su consentimiento, lo cumplirá. Solo serán doce meses, piensa como consuelo. Aunque puede que muchas cosas sucedan durante esos doce meses. (2017-2019)

Una familia afronta las consecuencias de las malas inversiones. La familia giraba entorno de las hijas, una de 22 y otra de 16. Elsa y Anna Arendelle. La segunda era un caso perdido, hiperactiva, loca. Elsa era el futuro de la familia, siendo una chica tan joven y hermosa la mayor tentación de su padre era casarla con un hombre rico que los sacara de las deudas.Pero los instintos de rebeldía de Elsa se hacían presentes, no dejaría que su padre la vendiera. No antes de luchar contra eso. Jack está dispuesto a casarse con ella, ser felices y mucho más, pero esta chica lo hace difícil...¿Hasta cuanto estas dispuesto a pagar? ¿Cual es el precio del amor?

Oferta No todas las ofertas tienen que ver con ropa. Él desea adquirir de nuevo aquel pedazo de tierra que había pertenecido a su familia por cuatro generaciones atrás, antes de que su propio padre la vendiera. Ella solo obedece a su padre, reprimiendo todos sus deseos a revelarse para no poner en peligro a su propia hermana ante las garras de él. Agnar Arrendell es capaz de hacer una oferta a cualquier hombre, su hija y aquel pedazo de tierra a cambio de un heredero varón y por supuesto algo de dinero. Una oferta que nadie es capaz de rechazar y mucho menos Jack Frost (PRONTO)