Tus padres te han votado de la casa por la edad que tienes. Ellos mismo te alquilan el un departamento, pero al llegar a el te encuentras con una persona no deseada...

Todo el mundo sabe el odio que hay entre Lucas, el chico guapo y popular, y Victoria, la chica más bien normal que cae bien a todo el mundo. Lo que nadie sabe es de donde nace todo este odio. Este año, se descubrirán muchos secretos y momentos que consideraban perdidos, y lo que nadie sabe, es que ambos comparten un pasado común. **** -Estoy bien, Chris, ya se me ha pasado... -¿Segura? Porque ahora mismo tienes la misma cara que una ardilla con la rabia... Me giro y le doy un golpe en el hombro por su comentario, aunque ha conseguido sacarme una sonrisa, porque se que lo ha dicho en broma para animarme. -Sí, bueno, si las ardillas fuesen verdes, claro está. Cuando acaba la frase Lucas se empieza a reír por su chiste. Lo mato, juro que quiero matarlo. Cuando me voy a tirar sobre él, Chris me vuelve a coger e intenta poner paz entre ambos. -¡Gilipollas! ¡Yo te juro que te mato! -Uhh, mira como tiemblo, sapo. En cuanto acaba la frase le miro a él y luego a Lucas. Ambos están tan sólo con una toalla, con el pecho al descubierto. Me fijo en que el pelo rubio de Chris está todavía húmedo de la ducha, y su pecho está muy cerca de mí, ya que no está seguro de que vaya a matar a Lucas. En seguida noto como la sangre me sube a la cara. Intento no fijarme mucho en el cuerpo de Chris. "Vaya cuerpo, dios mio... Este tío debería ir más sin camiseta..." -¿Sabes, sapo? Si lo que querías era verme desnudo, no hacía falta tanta comedia... Podías habérmelo dicho y nos duchábamos juntos, así ahorramos agua. Me guiña el ojo y se empieza a reír hasta que me suelto de Chris y le doy un puñetazo en la nariz.

Nunca creí que podría haber una persona destinada para mi, quiero decir, cuantas posibilidades hay que encuetres a tu alma gemela sabiendo que hay mas de 5 millones de personas en el mundo. Pero pasó, la encontré... no de la mejor manera posible... pero alfin y al cabo la encontré. Pasamos los mejores momentos juntos Muchas risas, llantos, peleas, besos...etc. ¿Pero que pasa cuando esa persona ya no está?

Cuando sus verdes ojos la miraban ella no sabía qué hacer o que sentir, era confuso y molesto, trataba y trataba pero luchar contra el corazón le resultaba imposible, molesto y cansado y el no era de nadie, nadie había robado su corazón, nunca había sentido celos, pero ella lo arruino, lo confundió y eso lo enojo porque el sabia que de ella se enamoro