Sin Planes Ni Recetas
A Cleo siempre le gustó tener el control sobre todo, en especial sobre su vida. Por eso tenía un plan perfectamente armado que nada ni, especialmente, nadie podía arruinar. Sin embargo, una pequeña y molesta piedra en su zapato la hizo detenerse a mirar el cuadro completo, y desde allí todo cambió, incluso ella misma...