Continuación de "DESEO". NO LO LEAS SINO HAZ TERMINADO EL PRIMER LIBRO. Él saltó, él intentó suicidarse, él sobrevivió. Te llamé mi amigo, mi hermano, mi compañero de trabajo, mi amante, mi esclavo, mi cosa, mi pertenencia, mi hombre, mi depósito de dolor, amargura y deseo. Mi amor de verdad. Lo siento, no puedo dejarte. No voy hacerlo jamás ... Aunque seas miserable, aunque estés en decadencia de emociones, seguirás siendo mío. No te permitiré escapar. Voy a recuperarte. Tenemos cuentas pendientes y yo sé que vas a aceptarme de vuelta, porque tú no eres tú sin mí, me necesitas, soy tu aire, tu sangre, estás tan infectado como yo de esta droga llamada enfermedad. Estás ligado a mí para toda la eternidad. Volverás amor, volverás arrastrándote hasta las llamas del infierno en el que juraste permanecer siempre a mi lado. Por amor, por lujuria, por las buenas, por las malas, como sea, pero volverás. Fic narrada desde el punto de vista de Emilio Osorio. ⚜Primer puesto por segundo año consecutivo en la categoría "Mejor Relación Tóxica" en los Emiliaco Fanfic Awards⚜ Escenas fuertes. Se pide discreción.

¿Cómo pude enamorarme de él? ¿Cuándo fue que dejamos de ser amigos, hermanos, compañeros laborales ... para convertirnos en sucios amantes? Fic narrada desde el punto de vista de Joaquín Bondoni. Advertencia: Contenido sensible, escenas fuertes. Se pide discreción. ⚜Primer puesto en la categoría "Mejor Relación Tóxica" y segundo puesto en la categoría "Mejor Cortavenas" en los Emiliaco Fanfic Awards⚜

AU, de internado católico, donde Joaquín es obligado a entregar su vida a la religión y Emilio es el protegido del padre superior. ''nunca hubo dos almas más destinadas a encontrarse'' Advertencia: -se tocan temas religiosos, en ningún momento es para ofender a nadie. -mención de drogas y alcohol -Relación homosexual, chico x chico -si note gustan estos temas, no se que haces acá.

-¡Por favor no sé lo lleve! -grité con todas mis fuerzas al ver cómo el papá de Emilio se lo llevaba a su coche. -¡Es mi mejor amigo! -volví a gritar sintiendo como las lágrimas resbalaban por mis mejillas. Sólo recibí silencio de parte de Juan y una mirada triste de parte de Emilio. De mi niño. Estaba siendo testigo de cómo el odio podía más que el amor. Sin más que hacer o decir, sólo pude ver cómo se llevaban a mi pequeño. A mi Emilio. Abrí la pequeña carta que me había entregado minutos atrás y sentí mi corazón quebrarse al ver lo que había escrito. "Nos volveremos a encontrar pequeño. Confía en mi. Te quiero." Atentamente: Tu niño de la sonrisa bonita.