Theras | ChanKai
«No hacía falta que Chanyeol extendiera las llamas por sus brazos para sentir el calor; bastaba con que sus ojos marrones se centraran en mí, reflejaran su llamarada a través de mis pupilas, extendiéndose por todo mi pecho y quemándome por completo. Así me consumía él, sin toques ni palabras, inocente y ajeno a todo l...