LA PROFUNDIDAD DEL AMOR
...Y tu respiración era posma, te pedí que no hagas esfuerzos, que alguien vendría pronto en nuestra llamada de auxilio, traté de levantarte nuevamente, pero fue inútil, te besé, tus labios ya no eran rojos y suaves; eran frígidos y morados por la helada lluvia. - Te buscaré Melody, en esta y mil vidas más. Cerras...