Eres mi omega
Stephen nunca espero que María Stark le pidiera aquello. Tenía 25 y el cachorro solo 10 años, era ilógico, pero firmo por la seguridad de aquel omega. Nadie imaginaria que algo hizo María Stark aquella vez en la cafetería y cuando su hijo tuvo su primer celo siendo ya un omega. Con el tiempo y teniendo 11 años para é...