Louis va como castigo a un campamento militar, y quizá no deba llamarlo castigo cuando conozca a uno de los soldados, uno de ojos verdes y cabello largo. No uno cualquiera, por supuesto, es el mismísimo hijo del coronel.

¿Qué pasaría si dos reinos estuvieran en guerra desde hace décadas? ¿Qué pasaría si esos reinos quisieran formar una alianza? ¿Qué pasaría si te enviasen a ti y a tu hermana a otro reino para que ella se casase con un príncipe superficial? ¿Qué pasaría si ese príncipe tuviese los ojos más bonitos que has visto jamás? Y lo más importante ¿Qué pasaría si un asesino andase suelto por ese castillo en el que estás de visita?

¿Qué ocurre cuando el lugar donde te contratan para trabajar resulta ser la residencia de un vampiro sanguinario, un tenebroso castillo al borde un un imponente acantilado? Louis Tomlinson es un joven emprendedor que busca salir de un ambiente tóxico familiar. Para ello, acepta un trabajo en el que tendrá que dejar su casa atrás e instalarse bajo una hilera de almenas. Lo que menos espera de este brusco cambio en su vida es que tenga que convivir con un ser misterioso, sediento de sangre. ¿Serán capaces de reprimir sus sentimientos o dejarán atrás cualquier ápice de racionalidad? ¿Podrá el amor cambiar a una persona que se desquebraja en su interior? Una torre, un secreto, un sendero en medio de un bosque y una pareja de yeguas.

Vida y vacío, palabras que yo conocía como sinónimos. La vida para mí era sobrevivir, la vida para mí era respirar y sufrir. Nunca lo vi de otra forma, era mi ley, era mi norma. ¿Cuándo nos enseñaron a vivir? Siempre fue callar y seguir, siempre fue levantarse y resistir. Un golpe, dos golpes, tres golpes y no importaban cuantos, solo que la gente te vea como un encanto. Y a veces hay que perder mucho, perder todo, hasta incluso perderte para poder sentir que cerras los ojos y respiras realmente. Pero vivir ya no fue tan frio. Vivir fue fácil cuándo estuve contigo. Vivir fue arder hasta que nuestras cenizas cayeron al vacío. Louis Tomlinson, un escritor que se consideraba un papel en blanco. Harry Styles, era una chispa que quemaba ¿Pero cuanto? Destino o coincidencia pero, algo hizo que ellos dos se incendiaron tanto.

Louis y Harry viven de recuerdos que crearon en un pasado, uniéndose sus caminos tras casi tres años separados. Tres años que Louis protegió a Harry desde las sombras, tres años que Harry vivió sin la verdad. Una leve mirada a través de una calle vacía de Londres será más que suficiente para alterarlo todo, para que Louis vuelva a Harry, para que Harry odie a Louis, para que aquellos asesinatos se retomen. ¿Mata el odio al amor, o acaso es del amor de quien nace el odio?

Harry ha pasado los últimos años trabajando duramente en la esquina de un semáforo, nada más y nada menos como limpiador de parabrisas. A pesar de las circunstancias, no se rinde en seguir ahorrando para pagar su carrera universitaria. Louis Tomlinson es dueño de una empresa multimillonaria, y un desgraciado con quien le apetece. No le importan los intereses de los demás. Con tal que no le involucres, le da igual. Pero después de conocer aquel chico del semáforo, supo que algo cambiaría. No todo es color de rosa. Sería una trayectoria de aceptación, enseñanzas, dudas y realidades. Después de todo, el amor también tiene dolor. Y resulta que aquel temeroso rizado, es más extravagante de lo que parece. Y todo gracias a la esquina de un semáforo. - FANFIC CULMINADO: 18/02/2021 (Esta historia es de mi autoría solamente.)

el cuartel stylinson es una mafia muy reconocida en todo el continente europeo por ser la mayor traficante de drogas,armas entre otras cosas. el hijo del dueño de este cuartel es Harry Styles y aunque es corto de edad con tan solo 19 años está al comando del negocio ya que es el proximo en la lista a liderar. Louis tomlinson es uno de los guardias del señor Harry Styles, el de más confianza para decir verdad, el es hijo del guardia de Des Styles y por ende su profesión se pasa de generación en generación.