¿Qué pasaría si un día conoces al amor de tu vida, pero está en coma? ¿Qué pasaría si un día despiertas y no recuerdas nada?

COMPLETA-(para leer del tirón) Clarke y Lexa son dos estudiantes universitarias que cursan el segundo año de la carrera de empresariales. Mientras que Lexa es inteligente, guapa y popular, Clarke es la típica chica que pasa desapercibida. Dos personalidades en polos opuestos y cuyos caminos están destinados a cruzarse un día por casualidad, consiguiendo que entre ellas nazca una conexión. ~~~ Esta obra es una adaptación del manhwa Fluttering feelings de la autora Ssamba que falleció antes de completar la obra después de una fatigosa lucha contra el cancer. La verdad es que esa historia me cautivó así que es por eso que he decido usarla como hilo conductor para esta fanfic de Clexa. Quizás no haya correlación en algunos aspectos con la obra original porque intentaré en lo posible "personalizarla" además de profundizar en la historia de los personajes hasta el final, ese final, que Ssamba nunca pudo darnos.

Desearía no perderme en sus pupilas como lo hacia. Era tan hermosa. ¿El problema? ¿Cómo iba siquiera a aprobar su asignatura si no me podía concentrar en nada mas que su belleza? Como podía haber tanta casualidad de que mi cita a ciegas también fuera mi sensual profesora.

Nadie dijo que ser una licántropa fuese la bomba; de hecho, para Leah Clearwater es una auténtica mierda. Para ella, es el origen de todas sus desgracias: la pérdida de su gran amor, la muerte de su padre e, incluso, es consciente de que quizá nunca pueda tener hijos. Todos los sueños que tuvo alguna vez se derrumbaron con el calor de la primera transformación y, aunque su vida y carácter parecen haber mejorado desde que dejó la manada de Sam Uley para unirse a la de Jacob Black, Leah no puede evitar seguir viendo su futuro de forma pesimista. Hasta que conoce a Lizzie, y todo su mundo se da la vuelta. La pelirroja parece portar su propia magia y hará que Leah cambie de opinión respecto a todo. Incluso hasta llegar a pensar que la fortuna no es tan zorra, después de todo. Portada: Ragoan