Segunda parte de "Quarantine"

La vida de Agoney está a punto de dar un giro de 360°. Él será coronado como rey y, además, tendrá que casarse con la persona que menos espera, removiendo inevitablemente todo lo que pensó que siempre quedaría en el pasado.

«Los dos conocíamos el riesgo. Ambos estuvimos de acuerdo en seguir adelante. Era difícil, casi imposible, pero existía la posibilidad».

A Agoney solo le gustan tres cosas: el verano, las canciones de los Smiths y Raoul. Sobre todo Raoul.

Agoney no cree en el amor. Hace tiempo que se dedica a vivir sin pensar a largo plazo. Pero alguien tiene otros planes para él. A veces el amor es cosa de dos o de más...

Agoney y Raoul llevan años con una rivalidad que ninguno de los dos tiene ni idea de cómo empezó. Ahora una serie de catástrofes, entre las que se encuentran una adicción y un profesor de música entrometido, darán la vuelta al asunto y harán ponerse al rubio una serie de retos para no acabar perdiendo completamente sus principios.

Raoul es el policía de un pueblo perdido en Asturias donde nunca ocurre nada, hasta que aparece un chico que no recuerda ni su nombre, del que tendrá que hacerse cargo. ¿Qué pasará? ¿Recordará algo sobre su vida? ¿Raoul descubrirá algo sobre él?

Un hotel de lujo se ve obligado a cerrar sus puertas a cal y canto por decisión de las autoridades sanitarias y todos sus huéspedes y empleados quedan aislados para evitar expandir el virus. Hay muchas reglas: lavarse las manos, llevar mascarilla y guantes... pero, sobre todo y la más importante: EVITAR EL CONTACTO HUMANO.