Historias de Mutilaciones

"Mira detrás del ojo de la cerradura" -ja!- me decían las voces en mi cabeza que cada día me hablaban sin parar yo soy Gabriela y sufro de esquizofrenia. Todo empezó cuando mis padres se quedaron en quiebra y a mi papa se le ocurrió comprar una carnicería pero vio que en ese tiempo la carne estaba muy cara y se le ocurrió usar "carne fresca" ,siempre me dio curiosidad ir a ver la puerta donde cada 11 de cada mes llevaba a sus empleados así que yo no los viera nunca mas ... Un día me arme de valor y fui a ver la voz de mi cabeza dijo que -ve presiento algo bueno- y fui esa puerta que siempre me a dado miedo , seguí a mi papa a su empleado asta la sala mi papa le dijo -bueno aquí saco "carne fresca"- y él empleado le dijo -wow aquí que se ase - -lo siento- le dijo poniéndole un paño con una cosa rara que supongo que te Asia dormir y él dijo -aquí, aquí saco mi carne fresca- lo ato a una silla de tortura y cuando despertó empezó torturarlo quitando le las uñas del pie una por una

Equipos de dos personas entran desarmadas en este laberinto subterráneo de piedra, contra su voluntad y sometiéndose a la extracción de alguna parte de su cuerpo que es compensada con su compañero, deben escapar sin guía alguna y siendo perseguidos por un cazador, el cual se aleja por mucho de lo comprendido como humano, pero dejando pequeño el termino de bestia. Dos chicas jóvenes, una sorda y otra ciega, tendrán que caminar por los pasillos musgosos de aquel laberinto hasta encontrar la salida o sucumbir ante el hambre, que solo es la menor de sus preocupaciones.