Hablaban sobre viejas idas y venidas, vueltas que da la vida y una que otra sacudida. Solían hablar de muchas cosas, de sus rutinas divertidas y menos estiradas, de las ferias antiguas y mal diseñadas, de guerras, de casas, de cosas pasadas. No solían apoyar el arte ni el amor, no creían en el corazón, no puedo decir si ahora lo hacen, pero creo que a pesar de todo, me seguía pareciendo fascinante cada una de las palabras que salían de sus labios, siempre deseando saber más, deseando haber nacido décadas atrás, parecía posible vivir más en aquella época, en sintonía con los fonógrafos y los mapas, con los rollos de las fotos, con los trenes y el buen cine. -Portada hecha por: Uriello Medina