- Pareces mi ángel guardián.-digo recuperándome del momento entre sus fuertes brazos. - ¿Ángel guardián?-ríe- Cariño, yo estoy más jodido que tú. Tú eres la que vas a ayudarme a escapar de este lugar.-me deposita sobre la acera y su cuerpo desaparece entre la niebla.