Habia una vez en un pueblo lejano, vivía una joven llamada Angelica ella era cariñosa, simpatíca, humilde y amable le gustaba jugar con los animales. Un día Angelica fue donde su abuelita y por accidente se tropeco con una piedra y afortunadamente un joven llamado Steve la agarró, al mirar Steve los ojos de Angelica se enamoró inmediatamente de ella y Angelica tambien se enamoró perdidamente de él. Al día siguiente Angelica se volvió a encontrar con Steve y Angelica le agradeció, Steve se puso a sonrrojar y se fue. Steve tenía una madre muy codisiosa y mala, Steve no era igual que su madre, él era un joven bueno, amable y humilde. Despues de un tiempo Steve le confiesa a Angelica su amor y Angelica tambien le confiesa que esta enamorada de él.