No encuentro solución a esto. la vida y su monotonía continúa, se envuelve en un mar de vaivén de costumbres. me aburre, cada pareja que tengo no puedo sostener una relación estable sin que mis sentimientos se vean destrozados por tu recuerdo.
El viento que acaricia mi piel, un olor sutil de tierra mojada me da a entender que una tormenta se aproxima a la lejanía. entro a mi casa, aquella pequeña y hogareña casa. sus colores de pintura se vuelven grises y lúgubre, la tristeza se hace notar.
Las primeras gotas se escuchan al caer por mi ventana, voy a la cocina y me preparo algo que pueda cenar abro mi refrigerador y no veo nada que me apetezca. Me decido por un té helado.
me dirijo a mi sofá, tomó mi celular y noto que me han escrito.
Erick.
"En serio me place el hecho de haberte conocido, tú tienes mucho que dar y no es por sentirme mejor que nadie más, pero creo que conmigo serias muy feliz"
Lo dejo en visto y dejo el celular a mi lado mientras contemplo la pared de mi sala. Ese chico en serio que ha esperado por mi respuesta amorosa. a veces me vuelve loca. No quisiera que nadie se enamorara de mi. Yo sé que es inevitable que un corazón se enamore de alguien más. Pero para mi es una bobería.
"Te amo, en serio que eres genial" recordaba cuando le decía eso a esa persona que tanto algún día llegue a amar. ¿En serio lo deje de amar? aún le sigo amando.
-Me saque de mi mente perdida cuando me sorprendió un estruendo, la tormenta se hacia mas fuerte, gracias a esos rayos se fue la luz en un instante, dejandome a oscuras solamente con por relámpagos iluminaba la sala.
de repente siento algo esponjoso rozar por mis piernas.
Ayla es una joven de 18 años que va a la universidad, todo está bien. Pero tiene un vecino que se mudó hace dos años atrás y actúa muy extraño. Y ella va a descubrir la verdad de él,cueste lo que cueste.