Una fiesta que parece empezar después de los exámenes es la soñada de todos: Cervezas, música, amigos, sexo y alberca.
Este tipo de ambiente no pertenece al de Kath, prefiere quedarse en sus propios pensamientos. Beth, su mejor amiga la convence para que se relaje y despeje su mente para ir a la diversión. Ella tiene razón y kath lo sabe. En la fiesta, kath conoce a un chico con quien se siente identificada, se siente cómoda estando con él; la anfitriona tiene un gran problema de celos con su ex gracias a Beth , toda su ira y desprecio la desahoga en kath.
Beth parece retrasarse porque en el camino conoce a un ideal e impecable desconocido con el que pasa la noche.
El problema es que esos dos chicos, el agradable y el Ideal desconocido, parecen ser la misma persona y aunque kath al principio lo evite, se entera de la verdad y no podrá evitar sentirse atraída hacia él. Después de un tiempo no logra recordar nada, absolutamente nada,pero con amistades y pistas descubrirá todo de nuevo y a quien le pertenece su corazón, quien se merece su amor, si vale la pena entregarlo todo. Ella tendrá que elegir una vez más. Una sola oportunidad de cambiar el rumbo de su vida , eso puede interferir con su amor.
Secretos que pesan más que los suspiros, dos corazones agonizantes anhelando ser salvados, aquellos corazones heridos que buscan una cura, al otro.
Unidos por una conexión que desafía las barreras del tiempo, descubren que el amor puede florecer incluso en medio del caos familiar que los rodea.
Mientras ambos luchan por encontrar su lugar en un mundo donde sus caminos no pueden cruzarse, las cicatrices ocasionadas por sus familias y los fragmentos de un amor perdido los persiguen. ¿Es posible soltar a quien una vez fue tu todo, aún cuando el destino parece decidido a mantenerlos separados?
Un amor, una pérdida y segundas oportunidades que demuestra que, a veces, lo más valiente es aprender a decir adiós.
Pero, ¿Crees poder despedirte del amor de tu vida?