Se conocen desde los seis años, y nunca se soportaron. Y ahora, que tienen quince, la madre de Francisco debe viajar, y decide dejar a su hijo, a cargo de su mejor amiga. Quién no es nada menos que la madre de Luna. Y por supuesto, como en todas las buenas historias cliché, los dos adolescentes deberán aprender a convivir... para evitar matarse entre sí.All Rights Reserved