Me lo advirtieron...
Tantas veces y en tanto lugares, siempre lo oyes, yo al menos lo hacia. Pero aquellos que hablan no entienden, aquellos que dan sus charlas moralistas, que creen que con un "todo va a estar bien", solucionan los problemas del mundo... Ellos no saben nada.
Tan desesperado. Eran las peleas, los gritos, los abusos, la tristeza, reproches, comparaciones, mi baja autoestima, la negrura del alma que no permiten ver mas allá de lo que alumbra este improvisado "pito".
Solo desaparecer, un hora, un minuto, apenas un segundo de mi vida, bastaba con cerrar mis ojos y dejarme llevar, descansar de todo, olvidarme. Dejar de existir.
Creo no haberlo notado, primero fue uno, luego necesitaba dos, finalmente nada fue suficiente. Yo no la consumía a ella, ella me consumía a mi. Pero todo valió la pena, pues gracias a eso conocí a la persona que salvo mi vida.
-"Te amo". -
-"Yo igual". -
*Historia con temática homosexual*
No podemos forzar a alguien a que se quede con nosotros, no podemos obligar a otra persona a que nos ame. Lo único que podemos hacer es darle un pedazo de nosotros y esperar que haga lo mismo, sin rompernos en mil pedazos, pero sin importar que pase hoy o que pase mañana, me siento afortunado de que mi camino se haya cruzado con el tuyo entre tanta incertidumbre.
-Nunca me había sentido tan vivo cómo cuando me enamoré de ti.
-Y yo con mucho gusto rompería mi corazón, por ti.
[TERMINADA]