El Fénix. Animal peligroso según todos los registros que se tienen de él sólo por tener la habilidad de crear fuego en cada una de sus plumas al instante en el que muere y su vida se reduce a cenizas. Pero entre ese lecho de fuego extinto que desaparece pronto se encuentra esa misma avecilla más pequeña, frágil e inexperta que acababa de nacer de nuevo, que aún Renace. En cambio, Netra, "La Nación del Pirolisco" y el único lugar donde existe cualquier forma de vida humana, aunque sea modificada, menciona que esta patria resurgió de lo que quedaba del Mundo Antiguo y se convirtió en un país perfecto y libre del mal que llevó a ese territorio inmenso de personas a su colisión, tal como el Pirolisco, bestia del pasado cuyo cuerpo está formado por el de una serpiente y sus patas al igual que su rostro son el de un ave. Es parecido an Fénix solo que este no renace, resurge y la nueva versión suya puede ser buena o más mala que él. Es posible pensar que aquellas criaturas se traten bien por sus características, pero no es asi, ya que son enemigos a muerte. Tal parece que así es en Netra, todos nos vemos como enemigos, esta idea es mas notable con nosotros los Eckantrons, es decir, los de totalidad humana en sus genes. Igual los Optikinéticos son un tanto egoístas pero por otras razones como que son algo reservados y competitivos pero aun son considerados mejores que nosotros nada mas por su mejor calidad de vida y su cualidad de tener dos tonalidades distintas de ojos. Pero los Índidroids, mitad humanos y mitad máquinas son perfectos. Esa es la simple vida de mi nación. Siempre observando gente maltratada, personas muriendo de hambre y peleando por el dinero y lo poco que queda y yo sola casi todo el tiempo desde que mi padre y mi hermano, Patrick y Deryan se alejaron de mi, o los alejaron de mí. Ya no me quedaban muchas razones para seguir continuando pero tenia que hacerlo porque hay personas que necesitan que las defienda. HastaAll Rights Reserved
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