Se supone que los milagros no ocurren, o por lo menos no deberían ocurrir, pero en una ciudad como Hikarizaka no es raro escuchar que cosas inexplicables suceden para cambiar la vida de sus habitantes. Misae gracias a una luz orbe pudo conocer a su verdadero amor quien resultó ser un leal y cariñoso gatito, a veces deseaba volver a hablar con él como alguna vez lo hiso pero los deseos así no se cumplen ni siquiera si estuviera dispuesta a sacrificarlo todo ¿Cierto?