Este poemario no es más que un primer intento: un primer intento por escribir poesía, un primer intento por sentir la voz de mis palabras, un primer intento por sentirme poeta, un primer momento por sentirme libre, un primer intento por hundirme en la escritura; es realmente, y tal vez lo único, que hice sin la intención de hacerlo realmente. Fue el primer intento de ser yo, de acostarme en cualquier sitio, de perderme en cualquier parte; e imaginar que estaba recitando para todos, que mi futuro, aún sin ser real, fuera ser un escritor. Este libro es mi mejor amigo y aún siendo su creador; siento que somos el mismo.